El motivo de este post es que amanecí de malas muy malas. Yo se lo atribuyo a tres cosas:
a) tengo mucho trabajo y por lo tanto no duermo bien
b) mi casa esta hecha un desastre porque a mis papás se les ocurrió la feliz idea de cambiar el piso de la casa, entonces tanto mi recámara como mi baño fungen como bodegas de cosas de las otras habitaciones y créanme no fue grato tener que estar moviendo muebles tanto para bañarme como para vestirme.
c) la tercera y no por ello menos importante es que ayer estaba en cabina, ya teníamos (mi compañero y yo) los audífonos puestos y estábamos esperando indicaciones de la productora; la llamaron afuera de la cabina y dejó el micrófono abierto. En ese momento sonó el teléfono que estaba junto al micrófono y escuché uno de los sonidos más fuertes y penetrantes en la historia de mis oídos. Por ende hoy escucho como si tuviera la cabeza adentro de una caja de cartón y supongo el daño es permanente, grr!
Ahora espero este mal humor se vaya pronto o tal vez termine arrancando cabezas más tarde.
3 comentarios:
calma mi niña, hay dias asi...
cuando vuelvas a casa en enero todo estara en orden, ya veras...
besitos hartos, solo para ti.
De hecho ya todo está en un desorden soportable, es sólo que a veces pierdo la paciencia. Besos
jeje algo extraño me pasó contigo Jimena; de vez en cuando mis sueños parecen fiestas y me encuentro a mucha gente que conozco y no. Pues en el de hoy hiciste acto de aparición. Fue bien raro! Besos
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