Cuando voy a hacer ejercicio generalmente me voy caminando hacia el gimnasio para ir calentando un poco los músculos. En el trayecto hay una casa cuya puerta tiene espejos y no es raro encontrarme a alguien que se arregla el peinado, la ropa o simplemente admira su apariencia.
Ayer fui a hacer ejercicio más noche de lo acostumbrado, así que cuando salí la calle estaba sola y oscura. Casi como por instinto, volteé a ver la puerda de espejo y me encuentro con la imagen casi borrosa de una viejita parada allí enfrente. Mi primera reacción fue buscarla en la banqueta donde yo iba caminando o la acera de enfrente y no la vi.
El estómago se me hizo pasita pues pensé que era algo sobrenatural, pero cuál sería mi sorpresa al darme cuenta que la imagen "fantasmal" venía de adentro de la casa y no era más que un efecto que provocaba la luz al dejar ver lo que estaba dentro y no reflejaba bien lo que estaba en el exterior.
Por si las dudas, caminé más rápido de regreso a casa.
2 comentarios:
jajajaja Yo por las dudas tbn habría vuelto rápido... Ojo, que los que deben dar miedito son los vivos! Los muertos nada hacen!
Buena vida Di!
Besos!
Amiga ya regresa :S
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