Domingo

Después de todo considero que ayer fue un buen día; y digo despues de todo porque llevaba dos noches durmiendo casi nada y con muchas muchas cosas que hacer, ademas de que creía haber perdido mi adorado cuaderno amarillo donde están escritas muchas cosas importantes para mi.
Desde principios de la semana pasada un amigo me hablo por télefono para invitarme al teatro y sin saber siquiera de que se trataba acepté gustosa su invitación por dos razones: tenía mucho sin verlo ni platicar con él y me gusta mucho el teatro.
A lo que me invito fue a la final de la V copa de improvisadores que se llevó a cabo en el teatro Helénico. Cuando llegamos ya había muchísima gente que se estaba acomodando para entrar al foro preparado frente a la Capilla del teatro. La mayoría iban ya específicamente a apoyar a uno de los dos equipos que se disputaban el trofeo (el pollo dorado) Los que apoyaban a las Vacas lácteas iban con sombreros, globos, corbatas, chamarras y demás cosas simulando manchas de vacas. Los simpatizantes de La polilla mecánica iban vestidos de naranja y algunos traían antenitas hechas con limpia pipas.
La mecanica del concurso es muy interactiva, pues es el público y un jurado los que califican el desempeño de los concursantes, además si al espectador le gusta mucho la improvisacion puede aventarle flores y si no, cojines. Me divertí mucho, es en realidad admirable la capacidad de los contendientes de crear imágenes, personajes e historias sin una preparacion previa. Todo sale directo de su imaginación.
Más tarde y siguiendo con la tradición de estas últimas dos semanas me fui a la cineteca a ver "Dear Wendy" lamentablemente para esos momentos pensé ya había perdido mi adorado cuaderno, entonces entre la película y el estar pensando al mismo tiempo dónde podía haberlo dejado me provocaron un horrendo dolor de cabeza. De todas formas me gusto mucho la película. Al llegar a mi casa encontre el cuaderno en un lugar en el que según yo ya habia buscado varias veces...en fin, el punto es que apareció.