Como ya mucha gente sabrá, una enooooorme pista de hielo fue construida en el zócalo capitalino; la verdad tengo unos sentimientos bastante encontrados.
Por una parte me da gusto que la gente tenga acceso gratuito a cosas nuevas, diferentes, fuera de la rutina y monotonía de la ciudad.
Pero por otro lado le veo muchas contras al asunto:
Me parece un excesivo gasto de electricidad el que tiene que hacerse para mantener el hielo en óptimas condiciones, cuando la temperatura ambiente oscila en los 17 grados centígrados.
No creo que sea chido contribuir al calentamiento global para que unos cuantos changos disfruten por un ratito del hielo
Supongo que esa energía electrica bien podría usarse para otras cosas más productivas, así como los más de 13 millones de pesos que se necesitan para su construcción y mantenimiento.
Me daría miedo ponerme unos patines de los que te prestan para usar en la pista, ya no sólo por los hongos, sino por toda la fauna que seguramente anida en ellos.
No sé, tal vez soy demasiado pesimista pero esta no me parece la idea más brillante.
2 comentarios:
Pues yo estoy de acuerdo contigo, principalmente en los contras, mucha lana que se gasta, y no toda la lana es del DF, sino también de los Estados, además le partieron en su mother a mi lugar favorito de la ciudad, ya no se puede ir tranquilo un domingo por la mañana a caminar, tomar coca cola en bolsita, caminar por Tacuba y llegar a Bellas Artes a comer esquites... Y lo de los hongos, eso si que es un coctel silvestre lo que debe haber en esos patines... Aunque al igual debe haberlo en los boliches... Yo por eso en lugar de deporte, asesino a mi flora intestinal con café y vodka. Besos.
jajaja! Pues la verdad tengo ganas de ir (por puro experimento sociológico) a tomar fotos de la pista y sus visitantes, es pero pueda hacerlo estas vacaciones.
Besos capi
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