lunes, abril 07, 2008

Raro pero cierto

Tal vez sea raro, pero no tomo café aunque me gusta mucho. Eso se explica con facilidad: la cafeína me altera hasta límites insospechados. Un solo trago puede hacerme temblar como gelatina, me da hambre compulsiva y me provoca un efecto similar al de haberme pasado de copas, e incluso me da una especie de "cruda" cuando la cafeína ha dejado mi sistema.
Hoy sucedió algo que catalogo de inexplicable. Como todas las mañanas al llegar a trabajar, mi jefé preparó café y cuando estuvo listo me mandó llamar. Me dijo: "sé que tú no tomas café, pero tienes que probar éste. Es el mejor que he probado en mi vida."
Dudé un poco antes de aceptar, pero tampoco podía negarme a una oferta como esa. Me serví aproximadamente un tercio de la taza y lo probé. En verdad era delicioso, pero aún así fui cautelosa y no volví a servirme más temiendo las consecuencias.
Lo más sorprendente del caso es que no me alteró los nervios y justo como todos los días me muero de sueño al momento de regresar de comer. ¿Hay alguna explicación a este extraño fenómeno?

6 comentarios:

Nostromo dijo...

Yo creo que tomaste una dosis muy pequeña.

Di. dijo...

Pues es que no necesariamente la dosis hace la diferencia. La semana pasada le di un solo trago a un café y con eso tuve para estar con los nervios alterados por un buen rato. Saludos Nostromo

Capi dijo...

Amo el café, yo me tomaré una jarra diaria, mínimo... Besos.

Miguel dijo...

a ver si entendi, ese cafecito no te altero los nervios y te dio sueño como siempre al regresar de comer?
seria descafeinado?? recomiendamelo..
a mi me encanta el cafe, tomo una taza o dos al dia

Capi dijo...

Por cierto, tenía rato sin pasar, me gustó el nuevo diseño.

Di. dijo...

Una jarra? vaya, espero que tengas un baño cerca para lidiar con tanto líquido, jaja! Qué bueno que te gustó el rediseño Capi!



Pues no dice que sea descafeinado, Miguel. Es de la marca "The coffee cup" y está producido en El Salvador